COMMANDO 1985
Commando es para muchos la mejor
película de acción de la historia, y no es para menos.
Mark L. Lester dirige esta explosiva
película, caracterizada fundamentalmente por el ritmo colosal de acción
impuesto. A contrapelo.
Creada fundamentalmente para relajarte y no pensar. Aunque sí que te da muchas enseñanzas. Fundamentalmente a no sacar la basura. Es un post-terminator. No cabe un re-orn aqui.
Arnold Schwarzenegger (John Matrix) es
un coronel de las fuerzas especiales del ejército de los Estados Unidos que
decide cesar su actividad yéndose a vivir a una cabaña de montaña con su hija
Jenny (Alyssa Milano).
Nos encontramos a un John Matrix, que
quien lo ha visto y quién lo ve, se dedica a vivir unos dias sabáticos, alejado
de las armas, ejerciendo de excoronel y padre guay. Cambio radical temporal.
Acostumbrado a partir cuellos, pescar peces es nivel amateur.
Esta noche te hago a la brasa
El pasado siempre está ahí, pero
Matrix lo disimula bien. Para que sus habilidades no caigan en saco roto y
sufran las consecuencias de la inactividad, John revienta árboles y pesca
pequeñas truchas, que mantendrán sus instintos más que abiertos, y ya de paso a
Jenny contenta.
Y que hace mientras su hija. Rezar
para que no llamen a su papá a filas. No es para nada tonta. Su padre
claramente la infravalora. Arnold es un
mal padre, de momento. Un padre machista, yo cazo, ella me cocina. Y un padre mentiroso,
que hace falsas promesas.
Si sacas la basura de día se te puede hacer de noche
Ser padre no es nada fácil, y más si
lo ejerces de soltero. Ni rastro de la madre que parió a Jenny. Es muy raro.
Que todo el comienzo es una tapadera
no cabe la menor duda. Endulzado por las
melodías tropicales de James Horner, la trama empieza como ya contamos.
Le hace creer a su hija que va a pasar
toda la vida comiendo pescado, bajo el calor de una estufa alimentada por
toneladas de madera de pino.
Que tampoco os engañe a vosotros,
Matrix no tiene ningun brazo débil, se la casca con las dos.
El parapolla llega en el momento en
que Jenny le sirve a su padre unos suculentos sándwiches. Todo está preparado y
el teatro de John está llegando a su fin. La casa con vistas al monte es el
entrante del menú parapolla. El general Franklin aparece con dos guardias, para
advertir a Matrix de que corre peligro, y que sus hombres están siendo
asesinados.
mierda, ni siquiera estoy casado
Le incita al consumo del gatillo. Ante
ese panorama, Matrix se arrepiente de no haber instalado un par de misiles
antiaéreos en el tejado de la cabaña, que le hubieran permitido desconocer tal
situación.
Jenny ya se lo huele. Adiós papá.
Matrix no sabe dónde meterse.
El general suelta la diarrea y se va
sin tirar de la cadena. La mierda cobra la forma de dos guardias que van a
servirle a nuestro musculado excoronel solamente para ganar tiempo. Mucho ayuda
el que poco estorba. Los dos guardias son asesinados por un grupo de matones
con Bennet(Vernon Wells)como líder. Bennet fue miembro de la banda
de Matrix, expulsado porque le gustaba demasiado matar.
Quien guarda halla, sin lugar a dudas.
Y si tienes un cobertizo en la cabaña, lleno de armas mejor que mejor. Todo
preparado. Las alusiones a los cepos y señuelos en esta película son una
constante. Demasiado tarde, te dicen que han secuestrado a tu hija y que tienes
que colaborar. Y una mierda. Te han jodido el coche, da igual. Ya está liada,
Jenny ha sido secuestrada y Matrix en su intento de recuperarla, se lanza con
el coche, roto, por la ladera de la montaña persiguiendo a los 4x4 que huyen
con su hija.
Las habilidades de conducción de Matrix son lamentables.
Actitud suicida, pero no tiene nada que perder. Consigue darles
caza aunque acaba con una buena estocada en formato somnífero. Rodeado por los
“secuestradores” empieza lo bueno.La misión para Matrix es sencilla, ayudar al
ex dictador de Val Verde Arius (Dan
Hedaya), a cambio obtendrá a su hija sana y salva.
A partir de este momento, Schwarzenegger
nos deleita con un amplio repertorio, hasta ahora nunca visto en su carrera.
Con 38 años, esta película le llega tras Conan y The Terminator. Plena forma.
Me voy a bajar del avión y te tiraré por un barranco, cabrón
Le montan en un avión dirección a Val Verde con uno
de los secuestradores, Henriques (Charles Meshack), que se encarga de
supervisar que el paquete llega a su destino. Hasta aquí todo correcto.
Mientras, fuera en el aeropuerto, Sully (David Patrick Kelly) supervisa que Matrix no salga del avión. Se
cierran las puertas, y antes de las maniobras de despegue John pide una manta y
una almohada para asesinar a Henriques. Lo revienta de forma escandalosa,
sonrojante, bochornosa. Se la pela estar rodeado de gente. Es un ahora o nunca.
El tiempo es oro. Es el asesinato más lamentable de la película, después del de
Cook que luego comentaré. Experto en camuflaje, sin duda, camufla el muerto con
el sombrero de su victima, una manta y una almohada y lo que es más importante,
le dice a una azafata, que por favor no molesten a su amigo, ya que está muerto
de cansancio. Qué gracioso.
Y PUNTO
La vena humorística en
esta película comienza fundamentalmente cuando Matrix entra al avión. Ante las
adversidades humor. Al mal tiempo buena cara. Y si te metes a un avión con
escasas opciones de escapar pues humor. ¿Equipaje de mano? Éste.
Arnold simula malestar y
mareos y se levanta en pleno despegue. Se escapa del avión habiendo dejado un
verdadero pufo en el avión. Despues de esta hazaña, es indudable que estaría en
condiciones de subir al Everest sin sherpa y a pelo. Con la histamina a tope y
sin tiempo que perder, acude a la terminal para pillar a Sully, el que lo
vigilaba que montase en el avión.
En las 11 hrs que dura el vuelo me da tiempo a estudiar una ingenieria y a rescatar a Jenny
Para ello usa una
técnica digna de Jara y Sedal, el cebo, el secuestro. Secuestra a una azafata
de avión, Cindy (Rae Dawn Chong) que había sido objeto de deseo de Sully. Este
le tira la caña de forma obscena en los teléfonos públicos, en reiteradas
veces, llegando a perseguirla hasta el coche, la negativa y las calabazas de
Cindy cabrean de sobremanera a Sully, que se va con el rabo entre las piernas.
Todo esto es presenciado por John Matrix, que vuelve a ser invisible para el
ojo enemigo. Podría habérselo cargado allí mismo, si, pero Arnold buscaba un
cómplice, aunque fuera a la fuerza, y asi lo hizo. La secuestró y le contó toda
la historia, de que la dejaría ir cuando le llevara hasta Sully. No eran malas
las intenciones. John le revienta el
asiento de copiloto a la azafata de vuelo para que al sentarse no le sobresalga
la jeta, para camuflarse de nuevo. Cindy está asustada y le toca conducir y
perseguir en contra de su voluntad a Sully. Le siguen desde el aeropuerto hasta
un centro comercial, parece que el pequeñin tiene una reunión de negocios, y es
desconocedor de que el pájaro se ha escapado de la jaula custodiada por el gato
Henriques.
"Rápido, que no se te escape"
Pero Cindy consigue un
hito, ser presa de 2 cosas a la vez, de Matrix y del pánico, cuando acude al
bar donde está Sully trapicheando en “un buen sitio para ligar”. A fin de cuentas no sabes quién te quiere
taladrar de forma enfermiza con más ahínco, el tipo musculado que te acaba de
secuestrar o el enano cabrón que te intentó camelar. A cual peor…
Las dudas invaden a la
tremendísima mulata, que ejerce de chivata, mientras John Matrix se está
frotando el capullo a la espera de que tiburón Sully pique en el anzuelo Cindy.
Lo que iba a ser una
caza silenciosa y sin armar mucho alboroto, se convierte en pesca con arpón
metiendo el cuerpo hasta la altura de los cojones. Arnold se ve envuelto, sin
comerlo ni beberlo, en una riña multitudinaria con agentes de seguridad y policías
desbordados por semejante “tarzán”.
Sully se da cuenta de la
presencia de la negrita, y esto le pone canino. “creo que he visto algo” les
dice a sus colegas y deja la reunión. Al ir a por ella sufre un parapolla no
creible, Matrix está ahí fuera, habiendo roto las leyes de la física. No puede
ser.
Pistoletazo de salida,
Sully le roba unas monedas a Cindy para hacer una llamada telefónica a su jefe
en Val Verde alertando así que John se ha pasado el trato de colaborar por el
forro de sus cojones.
Enano trajeado a la carrera directo al
pocket, la cabina telefónica. Matrix se da cuenta y trata de impedírselo. No lo
tendrá fácil, una decena de policías y guardias tratan de detenerlo, por culpa
de la dichosa azafata.
Si llama por teléfono estoy acabado
piensa Arnold. Sabe que si el ex
dictador Arius se entera de todo, matarán a su hija. Tiene unas horas, lo que
dura el vuelo, para poder encontrar a su hija. No está dispuesto a que Sully de
el aviso. Y lo consigue, revienta la cabina de teléfono. A pesar de la fuerza bruta
de Conan, la rata se le escapa a la carrera dando tiros con la pistola. Y de
nuevo toca persecución a 4 ruedas. Al salir del centro comercial a todo gas,
Cindy intercepta su coche y sube como copiloto. Matrix está cabreado, y no es
para menos, le responde con monosílabos. No es tiempo para fake taxy, toca
perseguir al tipo que sabe donde está su hija. Le da caza tras hacer una
conducción extrema, pero muy lamentable. Sully sangra de una ceja, pero no hay
tiempo para sangrar, continua la persecución, que es de lo mejor de la
película.
Tras hacer varias paradinhas brasileñas
con el coche, freno,, paro, que está rojo, a tomar por culo me salto el
semáforo, llega el momento. Embestida en el culo, Sully le dispara varias veces
pero John ni intenta esquivar las balas, confía en sus embestidas. Al final el
niño grande abusón le roba el bocadillo al crio en el recreo. Lo saca del coche
como si abriera una lata de sardinas.. Le pregunta que dónde está Jenny. Tras
las negativas de Sully, plan B.. La lealtad es conmovedora pero eso no le va a
salvar. Ahora lo mas importante en su vida no es eso, si no “!la gravedad”.
El gato se dirige con la pescadilla hacia
un barranco cercano, sujetándolo con una sola mano lo pone boca abajo.
Y de nuevo John no cumple su promesa,
le prometió que a él lo mataría el último. El sonido chorus de Sully al caer es
memorable.
"Lo más importante ahora en tu vida es la gravedad"
Ya sabe dónde seguir con la búsqueda, un motel de carretera al cual
irá otro matón, Cook, un negrazo hecho y derecho, buena planta, boina verde.
El encuentro es en principio igualado,
de cerdo a cerdo, a pecho descubierto.
Cindy finge estar con Sully en la habitación, Cook le ve la camisa algo
desabrochada y escucha el sonido de la ducha. El negro pica en el anzuelo..
Arnold desayuna boinas verdes y para mala suerte de Cook, tenía hambre. Lo asesina de forma horrible, sin querer, tras una paliza digna de “backstage”. Parapolla para Matrix, se le clava una buena estaca en una caída post-hostia. Menudo pincho de tortilla de morcilla. Tras insertarlo le pregunta que dónde está Jenny. Menuda guarrada. Lamentable, joder.
"¿Tienes miedo cabrón? Haces bien, porque este boina verde te va a dejar para los tigres"
"Yo desayuno boinas verdes y ahora tengo hambre"
"¿Dónde está Jenny? Cook!"
Tras una labor sigilosa, consigues los
planos de la isla y la posible localización de tu hija.
A partir de aquí, ya el tratamiento es
invasivo. Robar armamento para ir a la isla donde está secuestrada tu hija y
robar medio de transporte. Nada, algo fácil.
Tu amiga traicionera está mas
implicada que nunca, se cree la historia y ojo cuida no quiera echar un café.
Mientras estás robando todo el arsenal te detienen, qué te pensabas.
Furgón policial. Cuando ya
estabas eligiendo el material y el color del ataúd de Jenny, Cindy te lanza un
misil al culo,, con la intención de salvártelo. Lo logra.
Como concursante de supervivientes no
dejarías títere con cabeza. Toca isla y de nuevo camuflaje. Te maquillas hasta
el culo al bajar del hidroavión que robaste para ir a por tu hija. Armado hasta
los dientes,, es tiempo de merienda.
Comienzas masticando despacio y
sigilosamente, hasta que se te va la cabeza y revientas con bombas varios
puestos enemigos. A tomar por culo el sigilo. Ya todos los soldados de la isla
se enteran de tu presencia pero eso te gusta.
Bennett también se entera y ya está afilando
el cuchillo. Por tu culpa, van a matar a tu hija, y gracias a que ella está
espabilada, se escapa. Matanza en
escabeche, ya pierdes la cuenta de las vidas arrebatadas. Con lanza, cuchillo,
con granada, con pistola, recortada, a dos manos, a una y a la pata coja si
hace falta.
Menudo “moveset”, repertorio, mientras
tus bíceps se tambalean haces una fumigación de la isla en tiempo record. No se
ha había visto tanto plomo junto. Ni tanto pardillo.
O eres dios o los demás son
retrasados, solo eso lo explicaría. Tras dinamitar unos edificios y torres de
control de paja y cartón piedra eliminar enemigos a pelo es lo mas
sencillo. La resistencia iba menguando
inversamente proporcional al empalme de tu rabo. Pocos enemigos espabilados..
Lo más sensato era huir. Exterminio de la isla y de toda la fauna. Te estás
pasando.. Ya estás en el palacio del ex dictador, al cual derrocaste en
tiempos. Pardillo al canto, le haces un boquete en el torax para que aprenda a
volar por la ventana… Escuchas a tu hija, oh si, queda
poco.
Cerdos, ha llegado el lobo y vengo a soplar
Pero falta lo mejor, Bennett. Los
cantos de sirena te convencen para luchar a cuchillo. A machete. Hay problemas,
pero si te dicen que eres hombre muerto mientras te castigan el hígado pues te
animas. Y una mierda. Ataque de ira. Menudo teatro. Parece que te cuesta pero
lo tienes todo planeado. Bennett quiere jugar. Elige juego, tetris con tus
huevos Matrix. De eso nada amigo, yo quiero Mario Bros, tubería. Muerte final
vaporizada. Bennett suelta más vapor que la aldea de Asterix y Obelix en
invierno. Dios mío.
"Suelta un poco de vapor, Bennett"
Papá
Jenny
Un padre en apuros consigue su
objetivo,pero esta vez quiere tranquilidad para siempre. Quiere leña y
pescado en cantidades industriales. Toca retirada, parapolla para el jefe, su
mejor hombre tiene sentimientos, tiene familia, tiene una hija.
We fight for
love